Hace unos años, un hombre con canas y bien entrado en años viajaba mucho por razones de trabajo.
En cada viaje que hacía se solía hospedar en un lugar diferente. Sin embargo, en todos los lugares donde se alojaba siempre encontraba algo diferente; algo que le llamaba la atención, pero también algo que echaba de menos en relación con los anteriores hoteles donde se iba alojando. Esto solían ser siempre pequeñas cosas. Unos porque eran demasiado básicos, tenía solo habitaciones con camas,televisión, y baño; otros eran más complejos, de más categoría y tenían además de las habitaciones una sala de juegos , un salón común, un comedor,piscina.... pero casi siempre éstos solían estar en zonas urbanas, echándose de menos el pequeño hotel rural y acojedor de pocas habitaciones, en medio de bellos parajes naturales donde se respira el aire fresco y de tranquilidad.
Por ello, tuvo la idea de crear un hostal rural con ambas características, acercarse a las de los equipamientos de los grandes hoteles urbanos y superando la sencillez característica del medio rural. Todo ello, por supuesto, sin olvidarse del entorno de la característica comarca de pinares. Un entorno que sin duda, les sorprenderá...